Revista nº 804

96 Javier Gómez Sánchez Hernia de Amyand Actualidad Médica · Número 804 · Mayo/Agosto 2018 Páginas 95 a 97 Se decide intervenir quirúrgicamente, accediendo mediante vía inguinal anterior, donde se encuentra una tumoración dura, irreductible, compatible con hernia inguinal indirecta tipo 3 de Gilbert. Se diseca su saco herniario, y se procede a la apertura del mismo (previo aislamiento del campo con compresas beta- dinadas), visualizando en él un apéndice de aspecto gangrenoso (figura 3) , sin líquido libre purulento a su alrededor, así como en- grosamiento del mesoapéndice adherido al saco herniario. Se realiza apendicectomía por el abordaje inguinal, con pos- terior resección y cierre del saco herniario, que se reduce a la cavidad abdominal. Tras esto, se procede a realizar hernioplastia inguinal según técnica de Lichtenstein con malla de polipropileno. El postoperatorio del paciente transcurre sin incidencias, sien- do dado de alta a los dos días tras la cirugía. El informe anatomopa- tólogico confirma la presencia del apéndice vermiforme gangrenoso, parcialmente desestructurado, sin signos de malignidad. En la última revisión, el paciente no ha presentado re- cidiva herniaria, ni presenta signos de infección en la prótesis de polipropileno. DISCUSIÓN Las hernias inguinales constituyen una de las patologías más frecuentes en la práctica quirúrgica, siendo estas clasificadas por sus consideraciones anatómicas y funcionales. La clasificación más usada es la de Gilbert modificada (3), donde se sistematizan las hernias como: • Tipo 1. Hernia indirecta, con anillo menor de 2cm. • Tipo 2. Hernia indirecta con anillo entre 2 y 4 cm. • Tipo 3. Hernia indirecta con anillo dilatado mayor de 4 cm. • Tipo 4. Hernia directa, con fallo completo de toda la pared del canal inguinal. • Tipo 5. Hernia directa, con fallo diverticular de la pared. • Tipo 6. Hernia mixta (directa e indirecta, también conocida como “en pantalón”). • Tipo 7. Hernia crural. Esta clasificación sin embargo no se atiene al contenido que compone el saco herniario, por lo que cuando nos encon- tramos ante una hernia de Amyand, podría ser útil el uso de la clasificación de Losanoff y Basson (4), que se basa en el grado de inflamación del apéndice dentro del saco herniario: • Tipo 1. Con apéndice normal. • Tipo 2. Con apendicitis aguda localizada dentro del saco. • Tipo 3. Con apendicitis aguda y peritonitis. • Tipo 4. Con apendicitis y otro hallazgo intraabdo- minal (como sería un mucocele apendicular, pseu- domixoma apendicular…). La hernia de Amyand constituye la suma de dos de las patologías más frecuentes en cirugía, como son la hernia inguinal y la apendicitis aguda, de forma simultánea, algo poco común pero que debe tenerse en cuenta a la hora de estable- cer una actitud terapéutica. Su incidencia se estima alrededor del 0,1% aunque si bien esta cifra no discrimina entre en las hernias que presentan el apéndice sin signos de inflamación de las que contienen una apendicitis aguda. Figura 1. Figura 2. Figura 3.

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