Revista nº 808
García-Ávalos y Pérez-Milena Cambios en “cirugía menor” en centro de salud Actualidad Médica · Número 808 · Septiembre/Diciembre 2019 Páginas 164 a 169 · 165 · INTRODUCCIÓN De forma sencilla podemos definir la cirugía menor como el conjunto de procedimientos quirúrgicos e inter- venciones similares que se realizan en planos superficiales de la piel, con fácil acceso, corta duración del proceso, ne- cesidad de anestesia local y de los que se espera un bajo riesgo de complicaciones tras ella (1). Se estima que un 1,5% de la población es susceptible de este servicio anualmente según la oferta de servicios del Servicio Andaluz de Salud en 2006 (2). Para su oferta se necesita la existencia de un protocolo de cirugía menor, in- cluyendo procesos patológicos, técnicas, procedimientos y plan de seguimiento. Desde su implantación, hay una percepción de de- manda cada vez mayor por lo que ha ido en aumento tan- to el número de intervenciones como la cobertura po- blacional, demostrando su costo-beneficio y satisfacción tanto en el usuario como en el personal sanitario (3,4). Es por eso que, es necesario el aumento de recursos y la potenciación en los centros de salud de la cirugía menor como ya concluyen numerosos trabajos en esta materia (4,5). El ensayo MiSTIC en 2008 concluye que la calidad de las intervenciones realizadas por personal de primaria no es superior al realizado por el hospitalario, siendo la dife- rencia pequeña. Aun así, el grado de satisfacción y acce- sibilidad demuestra su increíble potencial al igual que la reducción de sus costes. Concluyen que es peligroso dejar en manos de profesionales no entrenados la cirugía me- nor, por lo que es necesaria una formación adecuada (6). Dentro del abanico de procedimientos, en los últimos años destaca el uso de la electrocirugía o corriente osci- lante de alta frecuencia dentro de las tres técnicas más empleadas (7-10) junto con la exéresis y la criocirugía. La patología más tratada es el fibroma, como se refleja en numerosos estudios (7,8,10), el angioma y el nevus me- lanocítico en intervenciones programadas. En situaciones de urgencias destaca la reparación de heridas y desbri- damiento siendo frecuente en su realización el papel de enfermería (11). La correlación entre el diagnóstico que se realiza previamente y el que se confirma tras su estu- dio anatomopatológico suele ser elevado (7,12), motivado quizás por la exclusión de toda aquella patología sospe- chosa de malignidad. En cuanto a la infiltración, se men- ciona como técnica muy frecuente para el tratamiento de diversas patologías relacionadas con dolor e inflamación del aparato locomotor, por localización más frecuente en hombro, codo, cadera y pie (10). Respecto al coste medio de un proceso de cirugía me- nor Vaquero et al. (13) estiman un gasto sanitario directo 17,45 veces menor para atención primaria comparado con hospitalaria (8,60 € vs 147,53€). Según el estudio de Tarra- ga (14), el gasto sanitario directo es inferior en 1,42 veces para primaria frente al hospital (43.78€ vs 62.3€). Por otro lado, Oltra (15) presenta en su estudio de costes los gastos directos, indirectos y no sanitarios con una mayor eficien- cia de la atención primaria, y un coste 3,41 veces menor frente a la atención hospitalaria (172,51€ vs 587,89€). El objetivo principal de este trabajo es conocer los cambios en la actividad del programa de Cirugía Menor desarrollada en un centro de salud al inicio del programa y una década después. De forma específica, trataremos de describir las características de los pacientes que se inclu- yen en el proceso de cirugía menor, diferenciar el tipo de intervenciones realizadas y el personal sanitario partici- pante, valorar la evolución de la cobertura poblacional del programa, así como conocer el gasto aproximado medio total si se hubiera realizado tanto en hospital como en Atención Primaria. MATERIAL Y MÉTODOS Diseño del estudio Se diseña un estudio descriptivo transversal mediante auditoría de historias y registros clínicos. Población de referencia y de estudio Pacientes incluidos en el proceso de cirugía menor en el año 2007 y en el año 2017 del Centro de Salud de San Felipe y a los que se les haya realizado cualquier procedimiento qui- rúrgico en esos dos años. Se elige el año 2007 porque fue el momento en que el programa de cirugía menor se puso en marcha en el centro de salud de estudio. Criterios de inclusión y exclusión Se incluirán los pacientes que hayan sido sometidos al cualquier tipo de intervención contemplada en el programa de Cirugía Menor. Se excluirán los pacientes con edad pediátrica (con 14 años de edad o menos), aquéllos en los que no cons- taba registro de la intervención en su historia clínica digital (Diraya) o en el listado de cirugía menor del centro, así como aquéllos en los que no existió un registro (en papel o digital) de la firma del consentimiento informado para la realización del acto de cirugía menor. Tamaño de muestra y procedimiento de muestreo Se eligió un muestreo sencillo donde los pacientes some- tidos a una intervención quirúrgica de cirugía menor, se en- cuentran en el seno de una población definida y son seleccio- nados en su totalidad en una única operación. Se ha escogido un solo centro porque permite un seguimiento de una zona concreta y sobre la misma población al inicio de la implanta- ción del programa y diez años después. La relación de los pa- cientes incluidos en el programa de cirugía menor se obtiene de los listados de quirófano que se guardan en el centro de salud en formato papel. Se calcula un tamaño de muestra mínimo, con un nivel de confianza del 95%, una precisión del 3% y estimando una cobertura poblacional del 1% (una media de 150 pacientes por año), el tamaño mínimo necesario de muestra será de 42 pa- cientes por año, un total de 82 en el total del estudio. Se opta por recoger los datos de todos los pacientes, de forma que el estudio sea reflejo de la realidad asistencial. Variables (dependientes e independientes) La variable principal es el tipo de cirugía menor realizada, que se codificarán según la cartera de servicios de Atención Primaria del Servicio Andaluz de Salud. De igual forma, se co- dificarán las lesiones tratadas según el CIE–9- MC. Otras varia- bles a recoger serán: Del paciente: edad (en años), sexo (mujer/hombre), diag- nóstico inicial antes de la cirugía. De la población: cobertura poblacional por año de estudio. Se obtiene del censo de personas adscritas al centro de salud en cuestión en los años estudiados y del número de intervenciones durante ese periodo. Profesional: tipo de profesional (médico/MIR/enfermero). Indicadores de calidad: envío de muestra a anatomía pa- tológica, registro de consentimiento informado. Diagnóstico de anatomía patológica.
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