Revista nº 811
Complicaciones en ventilación mecánica invasiva | Gómez de Oña J, et al. Actual Med. 2020; 105(811): 153- 159 158 Por otro lado, los antecedentes de enfermedades res- piratorias, aun ocupando la tercera posición, no pre- sentan un porcentaje demasiado elevado (17,07%), en contraste con el elevado porcentaje de factores de riesgo cardiovascular anteriormente expuesto. Las complicaciones derivadas de la ventilación me- cánica han ocurrido en un total del 41,46% de los pacientes. Las complicaciones más frecuentemente detectadas fueron el SDRA y la hipoxemia refractaria (10,98% cada una). Por tanto, el SDRA además de ser una causa para el empleo de VMI, también supone una complicación derivada de esta técnica. El estu- dio de Selvan et al, realizado entre enero de 2013 y septiembre de 2013 en la Unidad de Cuidados Inten- sivos del Centro Médico de la Universidad (Lubbock, Texas), que incluía a 200 pacientes que requirieron ventilación mecánica invasiva por insuficiencia res- piratoria aguda de distintas causas, determinó que la complicación durante la VMI más frecuente fue “la aparición de nuevos infiltrados o empeoramiento de los ya existentes”, algo que ocurrió en un 64,9% de los enfermos. En dicha variable estarían incluidos los casos de SDRA, así como los pacientes que presenta- sen volutrauma y atelectrauma (16). Las atelectasias como representante del atelectrauma, las sufrieron un 7,32% de los pacientes de nuestro estudio. El barotrauma continúa siendo una de las compli- caciones más graves en los enfermos en ventilación mecánica. En el estudio pionero llevado a cabo por Amato et al (17) se registró una incidencia de ba- rotrauma del 7%. En el presente estudio, la inciden- cia de barotrauma ha sido menor, de un 1,22%, muy probablemente por las mejoras en el conocimiento del uso de los ventiladores durante los siete años que separan ambos estudios, aunque no hay que descar- tar otros factores como es la enorme diferencia de enfermos. Por otra parte la modalidad de ventilación mecánica por presión utilizada en este estudio y la utilización de una estrategia de ventilación protec- tora parece disminuir el riesgo de ocasionar este tipo de lesión (18). El estudio Acute Respiratory Distress Syndrome Network Lower Tidal Volume (ARMA) (19) fue el primer ensayo clínico multricéntrico que documentó el beneficio de la ventilación protectora utilizando volúmenes tidal por debajo de los habitua- les hasta la fecha (6 mL/kg de peso corporal) limitan- do la presión meseta a 30 cm de H2O. Desde entonces existe evidencia que demuestra que la aplicación de volúmenes corrientes bajos en la vía aérea previene la aparición de VILI (19). Otras de las complicaciones más frecuentes, a la par que preocupantes, con una frecuencia relativa del 9,76%, fueron la aparición de traqueobronquitis y neumonías asociadas a ventila- ción mecánica, a pesar de las medidas de prevención mediante la aplicación del protocolo de Neumonía Zero. Los pacientes sometidos a VMI tienen riesgo de desarrollar neumonía asociada a ventilación me- cánica debido a microaspiraciones desde la cavidad orofaríngea, acúmulo de secreciones y disminución de la motilidad mucociliar. Las diferencias de nuestro estudio con respecto a los estudios de referencia sobre este tema están re- lacionadas fundamentalmente con factores metodo- lógicos (diseño de los diferentes estudios) y factores epidemiológicos dependientes específicamente de la población de nuestro estudio. Es importante destacar las limitaciones de nuestro estudio, ya que el princi- pal inconveniente es el pequeño tamaño de la mues- tra (82 pacientes), tratándose además de un estudio observacional realizado en un solo centro. Por lo tan- to se precisan más estudios multicéntricos a la hora de extrapolar los resultados aquí obtenidos. Como conclusiones podemos mencionar que este es- tudio determinó que los pacientes sometidos a VMI no presentan una tasa de complicaciones superiores a las expuestas por otras series publicadas. El SDRA y la hipoxemia refractaria son las principales compli- caciones que se asocian a la VMI. Los pacientes que son sometidos a VM en el Hospital de Poniente en Almería son mayoritariamente varones y pertenecen principalmente a edades comprendidas en las déca- das de los 50 y los 60 años. Los factores de riesgo car- diovascular fueron los antecedentes más frecuentes para la presentación de complicaciones secundarias a VMI. Además, las diferencias encontradas con otras series pueden ser explicadas por desigualdades en la metodología empleada para la realización de los dife- rentes estudios y en las particularidades epidemioló- gicas de la población estudiada. 1. O’Gara B, Talmor D. Perioperative lung protective ventila- tion. BMJ. 2018; 362 k3030. DOI: 10.1136/bmj.k3030 2. Pettenuzzo T, Fan E. 2016 Year in Review: Mechanical Ven- tilation. Respir Care. 2017; 62(5):629-635. DOI: 10.4187/ respcare.05545 3. Pham T, Brochard LJ, Slutsky AS. Mechanical Ventilation: State of the Art. Mayo Clin Proc. 2017;92(9):1382-1400. DOI: 10.1016/j.mayocp.2017.05.004 4. Amado-Rodríguez L, del Busto C, García-Prieto E, Albaiceta GM. Mechanical ventilation in acute res- piratory distress syndrome: The open lung revisited. Med Intensiva. 2017; 41(9): 550-8. DOI: 10.1016 /j.me - din.2016.12.012 5. Tonetti T, Vasques F, Rapetti F, Maiolo G, Collino F, Romitti F, et al. 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