

108
Isabel Mª Rojas Bruno
Identificación del paciente en el centro de salud
70% se “quejó”, y por último 72 pacientes, el 9%, ejerció una
conducta “agresiva” y violenta.
La similitud en los resultados
(Tabla)
de ambos sectores
estudiados, se basaron en organización y unidad del centro
de salud de atención primaria[4].
Se aprecian diferencias en cuanto al volumen de trámi-
tes, mayor en el punto de información, teniendo en cuenta
que habitualmente las gestiones son más rápidas, y también
el horario al público más amplio para el usuario[5], que en la
unidad administrativa.
La respuesta ante la negativa del profesional para reali-
zar el proceso sin tarjeta o documentación anexa se dispara
porcentualmente en la “queja”, quedando la “compresión” y
la “agresividad” bastante disminuidos e igualados en los por-
centajes.
Es muy interesante resaltar las diferencias por naciona-
lidades, ya que ante el mismo número de usuarios muestrea-
dos, los marroquíes aportan la tarjeta en la mayoría de las
ocasiones, por el contrario, los españoles lo hacen en menor
medida. Es apreciable la preocupación de los extranjeros por
estar identificados mediante la tarjeta sanitaria, mientras los
españoles no lo hacen habitualmente como deberían.
Los niños/as resultaron ser los colectivos estudiados en
el apartado géneros que en mayor número no aportaban la
tarjeta, al tratarse de recién nacidos que aún no han recibi-
do este documento, o bien padres que ante una situación de
alarma acuden al centro de salud sin apenas documentación,
de cualquier forma quedó pendiente para otro estudio.
A mayor edad en el tramo muestreado, mayor porcenta-
je en la presentación de la tarjeta sanitaria, explicando este
hecho que en edades avanzadas aumenta la responsabilidad
de contar con la tarjeta, y presentarla.
No entregar la tarjeta no significa que no se posea, el
análisis recoge sólo la no aportación para la identificación del
usuario en el momento de ser solicitada en el centro de salud
para realizar trámites, quedando pendiente si en realidad la
tiene, para otro estudio.
REFERENCIAS
1.
Orden de 07 de noviembre de 2011 por la que se establece
el procedimiento de expedición y activación de la tarjeta
sanitaria de Andalucía a los andaluces y andaluzas en
el exterior. Boletín Oficial de la Junta de Andalucía
2011; 229: 9-11 URL:
http://www.juntadeandalucia.es/ boja/2011/229/boletin.229.pdf2.
Real Decreto 2583/1996, de 13 de diciembre, de
estructura orgánica y funciones del Instituto Nacional
de la Seguridad Social y de modificación parcial de las
correspondientes a la Tesorería General de la Seguridad
Social. Boletín Oficial del Estado 1996; 86: 107-111. URL:
http://www.boe.es/boe/dias/1997/01/03/pdfs/A00107- 00111.pdf3.
Ley General de Sanidad 14/1986 de 25 de Abril. Boletín
Oficial del Estado 1986; 102: 15207-25. URL:
http://www. juntadeandalucia.es/boja/1998/74/d1.pdf4.
Decreto 197/2007 de 3 de julio que regula la estructura,
organización y funcionamiento de los servicios de
atención primaria. Boletín Oficial de la Junta de Andalucía
2007; 140:10-18. URL:
http://www.juntadeandalucia.es/ boja/2007/140/boletin.140.pdf5.
Decreto 262/1988, de 2 de agosto, por el que se establece
el Libro de Sugerencias y Reclamaciones. Boletín Oficial
de la Junta de Andalucía 1988; 73: 4016-17 URL:
http:// www.juntadeandalucia.es/boja/1988/73/d4.pdfPunto de información. Muestra 800
Unidad administrativa. Muestra 375
0
100 200 300 400 500 600
344
175
392
181
328
143
560
175
Nacionalidad. Españoles.
Género. Niños.
Edad. De 18 a 35 años.
Conducta. Protesta.
Tabla. Comparativa entre las dos zonas estudiadas. Se
contrastaron los estratos que no presentaron la tarjeta en un
mayor número de trámites.