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Gutiérrez Soto M.
Etiologíamicrobiana y sensibilidad a los antibióticos de las infecciones urinarias
jetos con patología urológica subyacente (2). Constituyen un pro-
blema importante de salud pública por su frecuencia, morbilidad
y ser una causa del aumento de las resistencias a los antibióticos
de los microorganismos implicados (3). Estos proceden de su pro-
pia biota, modificada por la presión ambiental y el uso masivo
de antibióticos (4). El mecanismo más frecuente para la infección
es el ascendente, desde la uretra. Los microorganismos acceden
durante la inserción del catéter, por vía intraluminal, a través de
la luz de la sonda, o extraluminal, a través del espacio entre la
sonda y la uretra. En la patogenia es fundamental la capacidad de
formación del biofilm, donde el crecimiento bacteriano es más
lento y las bacterias se vuelven más resistentes a los antibióti-
cos (5). El microorganismo más frecuente es, al igual que en las
IU adquiridas en la comunidad sin factores de riesgo,
Escherichia
coli
. Pero podría aumentar la frecuencia de otros bacilos gramne-
gativos más resistentes a los antibióticos, y los enterococos (2).
La presión antibiótica que sufren estos pacientes al estar expues-
tos a ciclos largos y repetidos de antibióticos puede hacer que
aumente el riesgo de infección por bacterias multirresistentes,
por lo que el tratamiento empírico de este tipo de infecciones
se complica. En este sentido estos pacientes podrían presentar
con mayor frecuencia infecciones por microorganismos multirre-
sistentes, como las cepas de bacilos gramnegativos productoras
de betalactamasas de espectro extendido (BLEE). Esto conlleva
dificultades asociadas al tratamiento de la IU, principalmente a la
hora de prescribir un tratamiento empírico en la comunidad (6).
El tratamiento antibiótico dependerá de la gravedad del paciente
y del riesgo de microorganismos multirresistentes. Es importante
solicitar siempre urocultivo y antibiograma, para adaptar el trata-
miento a la evolución clínica, y basar el tratamiento empírico en
los datos locales de sensibilidad antibiótica que los microbiólogos
deben proporcionar periódicamente (2).
La IU en la comunidad es causa frecuente de consulta, es-
pecialmente en mujeres en edades de máxima actividad sexual,
durante la menopausia y posmenopausia, y en varones a partir de
los 50 años; no obstante, el espectro de patógenos en las infeccio-
nes no complicadas es limitado, siendo
E. coli
el microorganismo
más frecuentemente aislado. La presencia en dichos grupos de
pacientes de cepas productoras de BLEE es variable, aunque se ha
constatado un aumento de la incidencia de dichos aislamientos,
fundamentalmente de
E.coli
, siendo en su mayor parte de origen
intrahospitalario, pero también adquiridas en la comunidad y en
pacientes no portadores de SVP (7).
En este trabajo se analizan los resultados del estudio micro-
biológico de las muestras de orinas de pacientes de la Unidad de
Rehabilitación de un hospital regional, incluyendo los datos loca-
les de sensibilidad antibiótica.
Material y métodos
Entre enero y diciembre de 2012 se procesaron 9209 mues-
tras de orina, sin seleccionar por la patología del enfermo, median-
te un protocolo de trabajo previamente establecido en el labora-
torio (8) en el que se incluyó el uso del citómetro Sysmex UF-1000i
como método de cribado. La detección microbiológica se realizó
en 143 muestras recibidas consecutivamente en el laboratorio,
procedentes de la Unidad de Rehabilitación del Hospital Univer-
sitario Virgen de las Nieves de pacientes con vejiga neurógena; y
9066 muestras procedieron de los servicios clínicos de Atención
Primaria del Área de influencia del Hospital. Este es un centro de
referencia en la región de Andalucía, al sur de España, y sirve como
Hospital General a una población de unos 440000 individuos.
Las muestras procedentes de la Unidad de Rehabilitación
correspondieron a pacientes hospitalizados, sondados o cateteri-
zados (100 varones y 43 mujeres); y las de la comunidad corres-
pondieron a 2200 varones y 6866 mujeres no embarazadas, no
sondados ni cateterizados.
Las muestras fueron obtenidas mediante técnica del chorro
medio, exceptuando en los pacientes sondados, donde se recu-
rrió al pinzamiento de la sonda, y cateterizados, que se obtuvo en
el momento de la cateterización. En todos los casos, se utilizaron
contenedores estériles o tubos con ácido bórico como conservan-
te (Vacutainer®, Becton Dickinson, Franklin Lakes, NJ). Éstos fue-
ron refrigerados y procesados en las primeras 24 h de acuerdo con
los procedimientos descritos previamente (9).
Las muestras, determinadas como positivas en el cribado
mediante Sysmex (por tener >150 partículas bacterianas/µL o >
50 células que asemejan a levaduras/µL, de acuerdo con los pun-
tos de corte establecidos previamente) (8), fueron sembradas en
el medio CHROMagar Orientation® (Becton Dickinson) utilizan-
do un asa calibrada de 1μL (COPAN, Brescia, Italia). Se realizó el
recuento de microorganismos uropatógenos, clasificándose de
la siguiente manera (10): negativo (<10000 CFU/mL); presuntivo
(entre 10000 y 100000 UFC/mL de dos uropatógenos o uno solo
sin leucocituria); significativo (bacteriuria o candiduria con un
recuento ≥100000 UFC/mL de uno o dos uropatógenos; o entre
10000 y 100000 UFC/mL de uno sólo con leucocituria); o flora
mixta (≥10.000 UFC/mL de más de dos uropatógenos). Los medios
fueron incubados durante 24horas a 37ºC.
Las colonias fueron identificadas y estudiadas su sensibilidad
por el método de microdilución en caldo mediante el sistema au-
tomatizado Microscan Walkaway® (Siemens Healthcare Diagnos-
tics, Munich, Germany). Los antibióticos testados para las ente-
robacterias fueron: Ampicilina, Amoxicilina con ácido clavulánico,
Cefuroxima, Cefotaxima, Cefepime, Gentamicina, Tobramicina,
Imipenem, Nitrofurantoína, Ciprofloxacina, Cotrimoxazol y Fos-
fomicina; para
Pseudomonas
: Piperacilina-tazobactan, Ceftazidi-
ma, Cefepime, Gentamicina, Tobramicina, Amikacina, Imipenem,
Meropenem, Ciprofloxacina y Fosfomicina; para
Acinetobacter
baumanii
: Piperacilina-tazobactan, Ceftazidima, Cefepime, Gen-
tamicina, Tobramicina, Amikacina, Imipenem, Meropenem, Ci-
profloxacina, Ampicilina-sulbactan y Colistina; para
Enterococcus
:
Ampicilina, Levofloxacina, Nitrofurantoína, Fosfomicina, Vancomi-
cina y Teicoplanina; para
Streptococcus
: Ampicilina, Vancomicina
y Teicoplanina; para
Staphylococcus
: Cloxacilina, Levofloxacina,
Gentamicina, Nitrofurantoína, Cotrimoxazol, Fosfomicina, Vanco-
micina y Teicoplanina.
Las cepas productoras de ß-lactamasa de espectro extendido
(BLEE) fueron detectadas por el método de microdilución, estu-
diando la sinergia entre las cefalosporinas de tercera generación y
el ácido clavulánico. En caso necesario se confirmaron mediante el
método de E-test. Todas las técnicas de estudio de la sensibilidad
se han realizado según las recomendaciones del
Clinical and Labo-
ratory Standars Institute
(11).
Los valores de incidencia de los microorganismos identifica-
dos y los datos de su sensibilidad se describen por el valor numé-
rico obtenido y su frecuencia.
Resultados
Se obtuvieron 2635 uropatógenos, 1646 (62%) pertenecien-
tes a mujeres y 989 (38%) a hombres (Tabla 1). De los 143 enfer-
mos con lesión neurológica en el 50% de los cultivos estos fueron
positivos (el 54% de los varones y el 39% de las mujeres):
E. coli
fue el más frecuentemente aislado (44%), seguido de
Klebsiella
pneumoniae (29%),
Enterococcus faecalis
(26%) y
Pseudomonas
aeruginosa
(11%) (Figura 1). De los enfermos procedentes de Aten-
ción Primaria (grupo control) en el 23% de los enfermos el cultivo fue
positivo (el 21% de los varones y el 24% de las mujeres):
E. coli
fue el
microorganismo predominante, con una prevalencia del 67%, segui-
do de
E. faecalis
(10%) y
K.
pneumoniae (9%). De forma específica se
aislaron
Streptococcus agalatiae
(3%) y
Staphylococcus saprophytic-
cus
(1%). Los bacilos gramnegativos no fermentadores representa-
ron el 1% (Figura 2).
Candida
no fue aislada en ninguno de los grupos.
En la Tabla 2 se reflejan los resultados obtenidos en los es-
tudios de sensibilidad a los antibióticos. Se aislaron 78 cepas de
E. coli
productoras de BLEE (representando el 22.6% de los
E. coli
en la Unidad de Rehabilitación; y el 4% de los
E. coli
en Atención
Primaria) (Tabla 1).
Sólo las cepas productoras de BLEE proceden-
tes de Atención Primaria presentaron resistencia a la cefoxitina
en el 20% de los casos. Dichas cepas fueron más resistentes a la
fosfomicina en la Unidad de Rehabilitación (14%), a la nitrofuran-
toína en Atención Primaria (12%), y en ambas localizaciones a ci-
profloxacino. La resistencia de
E. coli
a la ampicilina fue similar:
un 73% y un 66%, para la Unidad de Rehabilitación y Atención