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Encarnación Luque Fuentes
Diferenciasepidemiológicasentredosgruposdepacientesconpatologíadualgrave
también aparece una cierta tendencia no significativa (tal vez por
el tamaño de la muestra), en cuanto a la dependencia del alcohol.
En cuanto a la comorbilidad con otras patologías psiquiátricas,
entre los pacientes con esquizofrenia son menos frecuentes los
diagnósticos de trastorno afectivo grave (p<0,001), trastorno de
déficit de atención con hiperactividad (p<0,001), trastorno límite
de personalidad (p<0,001) y trastorno de ansiedad (p<0,001). No
hay diferencias para otros procesos.
Tabla 1. Diferencias sociodemográficas, de hábitos de consumo
y de comorbilidad psiquiátrica entre pacientes con patología dual
grave según tengan o no esquizofrenia.
Por último, los pacientes con PDG-esquizofrenia salen del cen-
tro con alta terapéutica conmenor frecuencia (p=0,007) que los otros.
En el modelo de regresión logística realizado por razón de
verosimilitud se han introducido las variables: sexo, estudios,
situación laboral, edad de inicio del consumo, dependencia de
alcohol, tabaco, opiáceos, cannabis, cocaína, hipnosedantes, po-
liconsumo y comorbilidad psiquiátrica. De todas ellas sólo existen
diferencias significativas en el sexo y en el grado de estudios
.
Para la variable sexo, ser mujer supone un factor de pro-
tección frente al diagnóstico de esquizofrenia. Este factor de pro-
tección es: 0,276 (IC95%: 0,125
-
0,611) veces mayor que para ser
varón. Ser hombre pues supone un riesgo de sufrir esquizofrenia
3,623 veces mayor que el de ser mujer (IC95%:1,636
-
8,00). El gra-
do de estudios también se relaciona con el riesgo del diagnóstico
de esta psicosis. El no tenerlos multiplica por 5,24 (IC95%: 1,128
-
24,343) la probabilidad de diagnóstico de esquizofrenia frente al
de realizar estudios superiores. Lo mismo ocurre para el que tiene
estudios primarios/secundarios frente al que los tiene superiores,
la probabilidad de estos últimos es 2,688 veces (IC95%: 0,591
-
12,231) inferior.
Discusión
Al igual que en nuestro estudio, donde el mayor porcentaje
de varones con patología dual grave se da entre los afectados de
esquizofrenia (91,9%), los estudios de Aleman et al. (2003)
(1), y
MacDonald et al. (2009)
(2), manifiestan que entre los diagnos-
ticados de esquizofrenia hay un mayor riesgo para los hombres,
en una franja etaria similar a la que se encuentra en nuestro tra-
bajo. Entre los pacientes estudiados en la comunidad terapéuti-
ca profesional, las frecuencias más bajas entre los afectados por
esquizofrenia se dan en aquellos que tienen estudios de grado
superior (2´0%), en contraste con el (54,5%) entre los que realiza-
ron estudios primarios.
Estos resultados concuerdan con los encontrados en diver-
sos trabajos experimentales como el de Kuperberg et al. (2000)
(3) que nos sugieren que el cociente intelectual de los pacientes
esquizofrénicos es más bajo que el de los controles sanos, como
resultado de un proceso de deterioro progresivo que se da en los
primeros.
En cuanto a la presencia de otros diagnósticos psiquiátri-
cos entre los pacientes psicóticos de nuestra muestra, se podría
considerar que a mayor gravedad en la patología psiquiátrica en-
contrada en los diferentes subgrupos de patología dual grave, la
comorbilidad psiquiátrica es menor. Hecho quizá debido a que
la propia gravedad de su patología de base pueda solapar otros
diagnósticos considerados de menor gravedad. También podría
tener que ver el hecho de que cuanto mejor definidos están los
criterios diagnósticos y más exhaustivos son, es más difícil con-
fundirlos con otros grupos patológicos.
El porcentaje de sujetos dependientes de tabaco hallado
entre los diagnosticados por nosotros de PDG-esquizofrenia es
del 84,8%, cifra intermedia a las encontradas entre pacientes
psicóticos ambulatorios (74,0%), en hospitalizados (88,0%) o en
enfermos crónicos institucionalizados (90,0%) (4).
La prevalencia de dependencia al cannabis es elevada
(60,6%), entre los enfermos con patología dual grave-esquizofre-
nia de nuestra muestra. Fenómeno concordante con el que des-
criben otros estudios que señalan que los pacientes esquizofré-
nicos presentan altas probabilidades de consumir cannabis (5);
siendo el riesgo de
presentar esquizofrenia en las personas que
han consumido cannabis, entre 2 y 25 veces superior al de las que
no
lo han hecho (6),(7). Se ha señalado que el cannabis pudiera
precipitar o incluso causar episodios de esquizofrenia (8),(9).
No
esquizofrenia
Sí
esquizofrenia
Nº pacientes
Nº
pacientes
Nivel de
significación
Sexo
hombre
165
91
<0,001
mujer
61
9
<0,001
Grado de
estudios
sin estudios
58
42
<0,001
1
arios
/2
arios
147
54
<0,001
superiores
21
2
<0,001
Dependencia de
alcohol
sí
147
54
0,073 no
significat.
no
79
45
0,073 no
significat.
Dependencia de
cannabis
sí
108
60
<0,001
no
118
39
<0,001
Trastornos
afectivos
sí
103
15
<0,001
no
123
84
<0,001
Trastornos de
ansiedad
sí
48
5
<0,001
no
178
94
<0,001
Trastorno límite
de personalidad
(TLP)
sí
58
9
<0,001
no
168
90
<0,001
Trastorno
por déficit de
atención con
hiperactividad
(TDAH)
sí
44
3
<0,001
no
182
96
<0,001
Lugar de
diagnóstico
psiquiátrico
centro
adicciones
148
38
<0,001
otros
77
61
<0,001
Tipo de alta
terapéutica
77
19
0,007
no
terapéutica
149
80
0,007
B
E.T.
Wald
gl
Sig.
Exp(B)
I.C. 95% para EXP(B)
Inferior
Superior
Sexo
-1,286
0,405
10,076
1
0,002 0,276
0,125
0,611
Estudios
9,154
2
0,010
Estudios(1)
1,656
0,784
4,468
1
0,035 5,240
1,128
24,343
Estudios(2)
0,989
0,773
1,636
1
0,201 2,688
0,591
12,231
Constante
-0,506
0,920
0,302
1
0,582 0,603
Tabla 2. Influencia del sexo y nivel de instrucción en el riesgo de pa-
decer esquizofrenia.
Modelo de regresión logística realizado por el método “backward
“por razón de verosimilitud
B: coeficientes de regresión
E.T: error estándar
Wald: valor del estadístico de Wald.
g.l: grados de libertad
Exp(B): valor de OR(odds ratio)
IC: intervalos de confianza
Estudios (1): no tener estudios frente a tenerlos
Estudios (2): tener estudios 1
arios
/2
arios
frente a superiores